MEJOR CON LUZ

 

                                                                                                                                                 26/12/20.

MEJOR CON LUZ

 

            Comparto contigo mis asignaturas pendientes, mis objetivos actuales, mis propósitos vitales que le dan sentido a todo. Mi trabajo personal en estos tiempos del cólera, convencido de que es la mejor inversión que puedo hacer en mí mismo. Me digo

            Respira con primor. Pon consciencia en la respiración. Nuestro vínculo con la atmósfera nos hace iguales, el oxígeno alimenta nuestras células aeróbicas. Haz respiraciones profundas varias veces al día. Haz del inhalar y exhalar  el objeto de tu atención. Disfruta y agradece este regalo divino.

            Dúchate con primor. Siéntete privilegiado por tener agua en casa. Siéntela acariciando tu piel, masajeando tu cuerpo. Haz del agua el objeto de tu atención. Disfruta y agradece este regalo divino.

            Cocina con primor. Selecciona, corta y guisa los alimentos con mucho gusto y delicadeza. Desarrolla tu creatividad, enriquece tus recetas. Haz de los alimentos el objeto de tu atención. Disfruta y agradece este regalo divino.

            Come con primor. Mastica, degusta y paladea cada bocado. Concéntrate en los olores, en los colores, en los sabores. Haz de la comida el objeto de tu atención. Disfruta y agradece este regalo divino.

            Haz ejercicio con primor. Senderismo, natación, yoga… siente con gozo cada paso, cada brazada, cada asana. Haz del ejercicio el objeto de tu atención. Disfruta y agradece este regalo divino.

            Lee, escribe, pinta, esculpe con primor. Conecta con el artista que llevas dentro, potencia tu talento, desarrolla tu ingenio. Haz de la creación el objeto de tu atención. Disfruta y agradece este regalo divino.

            Ama con primor. Haz el amor con pasión, acaricia con vehemencia, entrégate al placer, siente los cuerpos como templos sagrados. Haz del amor el objeto de tu atención. Disfruta y agradece este regalo divino.

            Vive cada momento con primor, como si fuera el último de tu existencia. Fluye con la vida, acepta lo que te trae, deja ir lo que se va. Haz del vivir el objeto de tu atención. Disfruta y agradece este regalo divino.

            El maestro Nisargadatta Majaraj respondía que era sencillo, cuando sus alumnos o los periodistas aludían a su estado de bondad y calma. “Cuando como, como, cuando hablo, hablo, cuando escucho, escucho, cuando leo, leo…”